Preparación
1- Para empezar, lavamos los papines con la ayuda de una esponja. Es importante lavarlos bien pero sin lastimar la cáscara, ya que esta la vamos a cocinar.
2- Cortamos los papines a la mitad y las ponemos en una olla. Sobre los papines agregamos abundante agua y un puñado de sal, lo llevamos a un fuego medio y dejamos que se cocine por unos 20 minutos. Necesitamos que los papines no se cocinen del todo, si no, que esten algo blanditos.
3- Una vez que logremos la textura deseada, los sacamos del agua y las reservamos en una bandeja.
4- Por otra parte, en una olla ponemos las 2 cdas. de manteca y dejamos que se derrita bien a fuego medio.
5- Luego agregamos los papines con la parte hacia abajo y dejamos que se doren.
6- Mientras se doran, agregamos una pizca de sal, pimienta negra, pimentón y orégano. Mezclamos un poco y agregamos el ajo previamente picado, la ralladura y el jugo de 1 limón, dejamos que se cocine por unos minutos más.
7- Cuando apaguemos el fuego, le ponemos el perejil y mezclamos bien.
¡Y listo, ahora solo falta servir!. Te recomiendo disfrutarlas cuando están bien calientes, ya que el sabor está más concentrado en este estado. Si no conseguis papines, podes utilizar la papa de tamaño normal, solo cortalas en tamaño mediano para lograr un parecido a los papines.